miércoles, 30 de abril de 2008

No hay vida en las islas

Ni de aquellos horizontes
nuestra enseña han de arrancar


no hay vida en las islas


i m only kelpers
in the sea
in the beach warm
in the Loneliness
soy un kelper solitario
en el mar
en la playa templada
en la Soledad
de las islas
figuras
desfiguradas
saltando arrastrándose parapetados
entre los medanos
empozados en salitre
corren se agachan toman posición
ordenes que aun resuenan confundibles con los gritos de las aves
gaviotas cormoranes viento
que aun no ha terminado de
desgrabar.

no hay vida en las islas
todo es una maqueta.

soy un kelper
mi vida es tan sola
he soñado tanto con un amigo cariñoso
que llegara desde lejos
tal vez
desde ese lado
del mar
a almorzar conmigo
hacer largas caminatas por la escollera
conversando amenamente de los clásicos
para luego despedirnos
fraternales
en el embarcadero
mientras arreglamos la próxima visita.



no hay vida en las islas
son solo ruidos en la habitación de al lado.



miro, pienso la única palabra
kelpers
sola en una costa
la soledad se construye por capas
¿la soledad es algo que transcurre?
o es una isla?
solo soy
un kelper
parado sobre la aurora boreal
que alguien imaginó para mi



los kelpers miran
el barco acercándose
quienes son nosotros?
se puede vivir encima de los muertos
de sus muertos?
se puede desarrollar
una vida?
pensando en los muertos?
todas las civilizaciones asientan sus hogares
sobre viejos cementerios
es posible levantar la vida digo sobre la vida de estos muertos?



no hay vida en las islas
cosas que caen de aviones.




quien respeta códigos en una guerra?
no nosotros
muertos extendidos sobre la roca
desnudos colgando del acantilado
picoteados sus organos por gaviotas y cormoranes
besados por los peces de agua fria
globulos de plancton fosforescente
una brillante marea fuerte aérea
maternas algas habrán envuelto
tenido dulcemente piedad mecido
sus cuerpos lastimados
cauterizando blanqueando
las heridas eléctricas con luces secretas
con suaves bálsamos salinos
las corrientes profundas los vientos salmodiando
las glorias de sus batallas
la belleza inútil de los bronces hundidos
las perdidas perlas
pútrido miasma de pajarracos y peces
banderas
bengalas boreales
señales aquí aquí
remediando
este vaciamiento este baldío
todo este sur
que ha quedado ahora que el agua se retira
que ha quedado en la playa
que picotean los últimos pájaros de la carroña?





eso hay bajo sus cruces
debajo a dos palmos bajo la grava
cuerpos falsos moldes modelados con algas y conchilla
textura embalsamada de gaviota
no están
j j l
jorge julio lopez
John Ward
nn
kelper
nunca estuvieron aquí

somos kelpers
aun hoy encontramos
nuestros hijos al jugar
granadas que nunca explotarían
ni al percutirlas con ideología
con método
trozos de una civilización lejana
previa
a nuestro blanco neblinoso pasado de kelpers
aquí no crece nada de todos modos


de que viven los kelpers?
de algas y té en hebras
cortado con crema
y /o limón
nunca juntos eso si
la leche se cuajaría
al entrar en contacto con el ácido



no hay vida en las islas
¿adónde va la gente sola?


soy kelper que es decir mucho
quien se acuerda ahora de mi
quien soñó mi nombre
mi rostro de kelper
quién imagina esta resolución
quién imagino la lancha una vez al mes
quién imagino que vendrían acá, mas tarde
con pañuelos a postrarse
frente a las cruces
que encalamos mi hijo y yo
en una changa de kelper
mirarlos con un poco de compasión y hastío
si , tedio
ganas de volver a casa junto al fuego
con el té caliente en el tazón
con el pastel de algas
de cabecitas de gaviotas
me gusta ver como se esconde el sol
tras su manto de neblina.

Con este poema participo en el primer href="http://heptagrama.com/sp/concurso-poesia-01.htm">Concurso
de Poesía
de Heptagrama

La enfermedad de las niñas



Larvas perlas arden
de vida fluyente bullente
en la memoria en el olor de la memoria
en el olor de la piel de los niños
mirada de niño en la conciencia del verano
empieza a gestarse la magnitud de la piel
los frutos salvajes
los juegos.



merienda

la ruborizada delicia
de espiar
como se cambiaba el hermano de mi amiga


abrir

la puerta para ver
lo que no se tiene
que ver
o si

la siesta

los padres haciendo algo
en la penumbra
y uno afuera
sin mencionarlo
no volver ya
como se partió
inocente
la fruta esa tarde.
Ignorante

jugar

a la casita
a la mama y al papá
una casita de frazadas en la cucheta
y la puerta siempre cerrada
para los adultos
que nerviosos intrigados
apenas recordando
interrumpen el juego
una y otra vez
para la cena.


Alejandro

fue el primer chico que
me mostró el pito
lo recuerdo aun
muertito
era un capullo rosado
una larva
nos reímos mucho
nos ruborizamos el mostraba
y yo desde lejos miraba
no toqué
después de eso
fuimos novios
tácitamente.


al acostarse

tras los parpados cerrados
las estampas del verano
se pueblan de transpiradas
turbadoras pesadillas
de peluches
casandosé
con barbies




vaginitas

ser mama mujer linda
enfermera veterinaria modelo maestra
todo en una valijita juliana
que se pedia en navidad o reyes
ahi estaba
el futuro anhelo solapado de los padres
de la sociedad
de las vocaciones
de las niñas

para el show

practicábamos eternas coreografías de xuxa o flavia
frente a los espejos probándonos ropa
ensayando futuros
artilugios
de mujeres para enganchar hombres
reverencias
para el gran publico que siempre
nos adoraba.


los sapos

Nos pasamos todo el verano con los sapos
Al promediar enero los agarraba casi sin repugnancia
Los colgábamos de las patas
En las púas del alambre
Nos sentábamos en el piso a mirarlos
Luego algo
Un llamado materno una pelea
Nos distraía


en la quinta

Canción lenta
de la lluvia en la superficie tersa
de la pileta



Granas

en los cumpleaños
terribles peleas
llantos
-te vino a buscar tu mamá
en el auto miro por la luneta
como empiezan a jugar
a los mejores juegos,
los de la noche.

ciegos

mientras los grandes hablan
aca en la pieza
todos los chicos
jugamos emocionados
al cuarto oscuro
apenas una excusa para tocarnos
para escondernos en el placard
y darnos besos
los chicos mas grandes
saben como hacerlo
las nenas nos morimos de verguenza y de ganas
de aprender braille

escondida

una quinta con pileta de noche
basta de escondidas es aburrido
ya no nos basta con buscarnos ahora queremos descubrirnos

semáforo

desde siempre los varones
inventan
excusas
para besarte en la boca
o si sos fea
en el cachete.




La enfermedad de las niñas

I-
Solo en ese momento un suspiro un suspiro
Esa manera de perdonar lo bello
aunque cruel aunque duela
Ese perdón
amanerar lo bello



II-
Te veo mirándote al espejo
Perplejidad al ver cepilladas tus rodillas
arboladas afiladas de raspones
pelones frutívoros
Soles rosas duraznales
De carozo de yemita
Robados a cambio de un beso de higo quemador
Las yemas de los niños están sudadas
y pegajosas de la leche del higo
Del látigo del latido del higo
Y a veces tienen aftas en las comisuras de las fauces
Pelados y vueltos a pelar por la intemperie
los frutos del verano.



III-
chicos de ciudad tristes chicos de ciudad
cautivos pasajeros de las vacaciones de verano
arrojados al verano
paladeando la aspereza del campo
del hinojo de la salvia
el arrobador veneno de los paraísos
de las violetas el diente de león la flor de sapo
druidas germinando
encomendados al verano
esperando los milagrosos cambios las revelaciones
Por ese rato abandonaban todo su año lectivo
de colectivos uniformes sarampiones
videojuegos boletines divorcios y
actividades extraescolares

IV-
Eran indios salvajes eran flechas buscando
no se que secretos milagros linguales, salivales , bucofaríngeos
Eso nunca va a cambiar oh no, nunca cambiará
Mas valdría haber retrasado
glaceado el escozor
el ardor de las cerezas
Resistir el perlado sucumbir de los nísperos
No teñirse los muslos y los dientes con las moras
que pinchaban las piernas del pantalón pollera
Mas valdría no haber visto brillar las uñas rosas
pelando desgajando mandarinas
O ese dedo
ese dedo en busca de jugos
hurgando en el ombligo de la naranja
juegos secuestros rescates
Revolcones en el pasto que manchaba
las ropas y no salía
decían las madres furibundas
sabiendo oh temiendo

V-
Te acordás de ese día no?
Sabés de que hablo, no es cierto?
De lo que decían
nuestras institutrices inglesas
La mía se llamaba Stella Maris
Delicada lila ahogaba de alcanfor las partes a cubrir
Y guardaba su cepillo en el armario
Para domesticar así la belleza
Las pieles ahh! Debían pulir su transparencia
calcárea ósea fósil de vidrio arenado
de esmeril
Me enseñaba cuidadosamente
las más arteras flexiones
de las que son capaces las viejas señoras
para conservar largamente el favor de un joven
Mas valdría no haberlo escuchado
De todo lo que he sido capaz
Por complacer los caprichos
Tiernos dictatoriales
Ecuadores del flujo
Que entre mis manos pedían
Fiestas de guardar



VI-
juegos de niños con niñas
ocultas escondidas
prohibidos combates
los juegos de los niños en verano
los inquietantes juegos
las crueldades atroces sobrenombres
torturas
a los animales
a las chicas
perseguir atrapar buscar cazar
esconderse huir ser
rescatadas

VII-
esa sensación
el peso del cuerpo urgente
que no sabe
pero intuye pero busca
doblega se somete
la respiración agitada
las risas nerviosas
el combate encarnado superfluo
la floja oponible resistencia
La muñeca un poco retorcida la expectativa
El corazón arenoso
El victorioso beso usurpado
La entrega el conocimiento
La comprensión
La luz
La enfermedad de las niñas.



(Del libro "La enfermedad de las niñas"
Celeste Diéguez
Pajarosló ediatora/coleccion 07)

martes, 29 de abril de 2008

La enfermedad de las niñas

Larvas perlas arden
de vida fluyente bullente
en la memoria en el olor de la memoria
en el olor de la piel de los niños

mirada de niño en laconcienciadelverano
empieza a gestarse la magnitud de la piel
los frutos salvajes
los juegos
.



merienda

la ruborizada delicia
de espiar
como se cambiaba el hermano de mi amiga


abrir

la puerta para ver
lo que no se tiene
que ver
o si

la siesta

los padres haciendo algo
en la penumbra
y uno afuera
sin mencionarlo
no volver ya
como se partió
inocente
la fruta esa tarde.
Ignorante

jugar

a la casita
a la mama y al papá
una casita de frazadas en la cucheta
y la puerta siempre cerrada
para los adultos
que nerviosos intrigados
apenas recordando
interrumpen el juego
una y otra vez
para la cena.







Alejandro

fue el primer chico que
me mostró el pito
lo recuerdo aun
muertito
era un capullo rosado
una larva
nos reímos mucho
nos ruborizamos el mostraba
y yo desde lejos miraba
no toqué
después de eso
fuimos novios
tácitamente.






al acostarse

tras los parpados cerrados
las estampas del verano
se pueblan de transpiradas
turbadoras pesadillas
de peluches
casandosé
con barbies



















vaginitas

ser mama mujer linda
enfermera veterinaria modelo maestra
todo en una valijita juliana
que se pedia en navidad o reyes
ahi estaba
el futuro anhelo solapado de los padres
de la sociedad
de las vocaciones
de las niñas

para el show

practicábamos eternas coreografías de xuxa o flavia
frente a los espejos probándonos ropa
ensayando futuros
artilugios
de mujeres para enganchar hombres
reverencias
para el gran publico que siempre
nos adoraba.


los sapos

Nos pasamos todo el verano con los sapos
Al promediar enero los agarraba casi sin repugnancia
Los colgábamos de las patas
En las púas del alambre
Nos sentábamos en el piso a mirarlos
Luego algo
Un llamado materno una pelea
Nos distraía





en la quinta

Canción lenta
de la lluvia en la superficie tersa
de la pileta








Granas

en los cumpleaños
terribles peleas
llantos
-te vino a buscar tu mamá
en el auto miro por la luneta
como empiezan a jugar
a los mejores juegos,
los de la noche.

ciegos

mientras los grandes hablan
aca en la pieza
todos los chicos
jugamos emocionados
al cuarto oscuro
apenas una excusa para tocarnos
para escondernos en el placard
y darnos besos
los chicos mas grandes
saben como hacerlo
las nenas nos morimos de verguenza y de ganas
de aprender braille

escondida

una quinta con pileta de noche
basta de escondidas es aburrido
ya no nos basta con buscarnos ahora queremos descubrirnos

semáforo

desde siempre los varones
inventan
excusas
para besarte en la boca
o si sos fea
en el cachete.











La enfermedad de las niñas

I-
Solo en ese momento un suspiro un suspiro
Esa manera de perdonar lo bello
aunque cruel aunque duela
Ese perdón
amanerar lo bello



II-
Te veo mirándote al espejo
Perplejidad al ver cepilladas tus rodillas
arboladas afiladas de raspones
pelones frutívoros
Soles rosas duraznales
De carozo de yemita
Robados a cambio de un beso de higo quemador
Las yemas de los niños están sudadas
y pegajosas de la leche del higo
Del látigo del latido del higo
Y a veces tienen aftas en las comisuras de las fauces
Pelados y vueltos a pelar por la intemperie
los frutos del verano.



III-
chicos de ciudad tristes chicos de ciudad
cautivos pasajeros de las vacaciones de verano
arrojados al verano
paladeando la aspereza del campo
del hinojo de la salvia
el arrobador veneno de los paraísos
de las violetas el diente de león la flor de sapo
druidas germinando
encomendados al verano
esperando los milagrosos cambios las revelaciones
Por ese rato abandonaban todo su año lectivo
de colectivos uniformes sarampiones
videojuegos boletines divorcios y
actividades extraescolares







IV-
Eran indios salvajes eran flechas buscando
no se que secretos milagros linguales, salivales , bucofaríngeos
Eso nunca va a cambiar oh no, nunca cambiará
Mas valdría haber retrasado
glaceado el escozor
el ardor de las cerezas
Resistir el perlado sucumbir de los nísperos
No teñirse los muslos y los dientes con las moras
que pinchaban las piernas del pantalón pollera
Mas valdría no haber visto brillar las uñas rosas
pelando desgajando mandarinas
O ese dedo
ese dedo en busca de jugos
hurgando en el ombligo de la naranja
juegos secuestros rescates
Revolcones en el pasto que manchaba
las ropas y no salía
decían las madres furibundas
sabiendo oh temiendo

V-
Te acordás de ese día no?
Sabés de que hablo, no es cierto?
De lo que decían
nuestras institutrices inglesas
La mía se llamaba Stella Maris
Delicada lila ahogaba de alcanfor las partes a cubrir
Y guardaba su cepillo en el armario
Para domesticar así la belleza
Las pieles ahh! Debían pulir su transparencia
calcárea ósea fósil de vidrio arenado
de esmeril
Me enseñaba cuidadosamente
las más arteras flexiones
de las que son capaces las viejas señoras
para conservar largamente el favor de un joven
Mas valdría no haberlo escuchado
De todo lo que he sido capaz
Por complacer los caprichos
Tiernos dictatoriales
Ecuadores del flujo
Que entre mis manos pedían
Fiestas de guardar






VI-
juegos de niños con niñas
ocultas escondidas
prohibidos combates
los juegos de los niños en verano
los inquietantes juegos
las crueldades atroces sobrenombres
torturas
a los animales
a las chicas
perseguir atrapar buscar cazar
esconderse huir ser
rescatadas







VII-
esa sensación
el peso del cuerpo urgente
que no sabe
pero intuye pero busca
doblega se somete
la respiración agitada
las risas nerviosas
el combate encarnado superfluo
la floja oponible resistencia
La muñeca un poco retorcida la expectativa
El corazón arenoso
El victorioso beso usurpado
La entrega el conocimiento
La comprensión
La luz
La enfermedad de las niñas.






Celeste Diéguez

Pajarosló editora

colección 07































viernes, 25 de abril de 2008

jueves, 24 de abril de 2008

Corporalidades femeninas

El miércoles 30 de abril de 19:30 a 21 horas, tenés la oportunidad de ver el trabajo que hacemos en el grupo 'corporalidades femeninas'. en esta ocasión te invitamos a participar del modo que te sientas más cómoda/o (mirando, narrando, movilizándote con nosotras).
en este encuentro podrán participar varones y mujeres.
en el primer momento nos presentamos y después desarrollamos el taller como lo hacemos habitualmente.
a través del movimiento, palabras y resonancias, encontramos las situaciones-escenas que nos interesan. pueden ser situaciones reales, presentes, pasadas, futuras, imaginadas, soñadas.
el dispositivo de trabajo se llama 'sensodrama'. permite acceder a información que surge repitiendo y sosteniendo posiciones en el espacio dramático. generalmente ocupamos la escena como ocupamos otros espacios vitales.
la persona interesada en ver escena, acompañada por la coordinación, narra la historia y selecciona a las integrantes del grupo que intervendrán. de este modo se ubica en un lugar de autor/a-espectador/a, tomando distancia de la situación que se recrea exclusivamente para cada narrador/a.
las vacantes son limitadas por lo que te sugerimos te comuniques a través del correo o telefónicamente al 4 57 04 97 te esperamos. cordialmente. diana fainstein.

sábado, 5 de abril de 2008

Una vela// Dr.Alvarez

Es que cerca de mi casa vive una piba
que por cinco mangos te chupa la pinga
,yo la conozco desde muy pendeja
por eso no me cobra si quiero tocar sus tetas.
Ella vive a dos casas de mi puntero
por eso cuando voy a comprar faso la veo
Ella me dice: "chico, invitame a fumar que ése es rico"
.No te asustes por lo que te cuento,
pero en mi vecindario todo esto es cierto,
todos tienen fierros, yuta tiene miedo
entonces tiran sin preguntar primero.
Y esquivando balas con mi bicicleta
voy a casa de mi puntero a buscar mi hierba.
El tiene ese faso rico
que cuando lo fumo quedo bien chino.
Y cuando salgo estoy atento
porque esos putos siempre se están escondiendo
los azules me persiguen por que fumo marihuana
Y yo lo mando a…
Yo los pierdo por un camino de tierra
la lancha no me alcanza, esta hecha mierda,
Alguno se baja y me empieza a correr
pero no van agarrarme por que se que hacer.
No voy a dejar de pedalear
hasta que salga por atrás a la calle Pilar
y voy a doblar en Echeandía
por que yo sé que ahí hay un solo policía.
Ese me conoce, no me a pararsabe que no ando en nada ilegal
sabe que sólo vengo de comprar mi hierba
para tirarme bajo el sol y fumarme una vela…
dos velas, tres velas, cuatro velas.
Mis armas son las palabras por que fierro no tengo,
pero la yuta quiere allanar mi ghetto,
me buscan a mí por que no tienen huevos
de tirotearse con esos que joden a terceros,
yo los espero que vengan cuando quieran
mirando Los Simpsons y fumando una vela.